domingo, 22 de marzo de 2009

Partida contra un marciano

Muchas veces en los clubes de ajedrez circulan posiciones fantasiosas de distinto tipo, una de las cuales, muy bonita, la vamos a considerar ahora.
Se cuenta que bajo la sombra de un árbol un aficionado estaba analizando partidas de ajedrez, cuando de pronto se le apareció un marciano preguntándole qué estaba haciendo. Este le explicó y el marciano se interesó por el juego y le pidió que le explicara cómo se jugaba.
El aficionado poco a poco le fue haciendo comprender al desconocido las reglas, y la última indicación fue "cuando un peón llega a la octava línea, se puede cambiar por cualquier pieza"
Comenzaron a jugar una partida hasta que se llegó a la siguiente posición:


Juegan blancas. El blanco (el aficionado) aquí jugo Rc2, amenazando mate inevitable. Sin embargo el marciano jugó h1=Rey.
El aficionado pegó un salto. "No se puede pedir rey" dijo. "Pero usted me dijo que el peón se podía cambiar por cualquier pieza", replicó el ser desconocido.
Ahora el aficionado comprobó que luego de hacer Ad4, le daba mate al primer rey, pero el segundo rey quedaba ahogado, por lo que el resultado sería tablas.
Entonces siguió pensando y encontró la solución salvadora: a8=Rey negro!!. Fue entonces el marciano el que protestó, pero las reglas ya eran claras "se puede pedir cualquier pieza". Por lo tanto las negras debieron jugar Rb8 (única).
El blanco jugó h7, su rival contestó Ra8, a lo que siguió h8=Dama y jaque mate a los tres reyes negros.

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